Si estás considerando renovar tu baño, una excelente opción es cambiar tu bañera por un plato de ducha. Esta transformación no solo mejorará la estética de tu baño, sino que también aumentará su funcionalidad, adaptándose a las necesidades del día a día. A continuación, te explicamos todas las ventajas de este cambio y por qué es una opción cada vez más popular entre los propietarios.
Ventajas de cambiar la bañera por un plato de ducha
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Ahorro de espacio
Si tu baño es pequeño o quieres aprovechar mejor el espacio, el plato de ducha es la opción ideal. Al ocupar menos espacio que una bañera, podrás aprovechar ese metro extra para otros elementos o, simplemente, disfrutar de un baño más amplio y cómodo. -
Mayor accesibilidad y seguridad
Las bañeras pueden resultar incómodas o peligrosas para personas mayores, niños o personas con movilidad reducida. El plato de ducha ofrece un acceso mucho más fácil, eliminando la barrera que puede suponer una bañera alta. Además, muchos platos de ducha incluyen materiales antideslizantes para evitar resbalones. -
Fácil mantenimiento
Las bañeras tienden a acumular moho, grasa y cal debido a la humedad y al uso constante. El mantenimiento de un plato de ducha es mucho más sencillo, ya que la limpieza es más rápida y, generalmente, solo requiere productos específicos para evitar la acumulación de cal y mantenerlo en perfecto estado. -
Estética moderna y minimalista
Los platos de ducha tienen un diseño más elegante y contemporáneo que las bañeras tradicionales. Existen modelos de distintos tamaños y materiales, como resinas o cerámica, que pueden adaptarse a cualquier estilo de decoración. Un plato de ducha a ras de suelo con mamparas transparentes puede dar un toque minimalista que hará que tu baño luzca mucho más moderno. -
Ahorro de agua
Aunque parezca que una bañera es la mejor opción para relajarse, en realidad, el plato de ducha te permite ahorrar agua al reducir el tiempo y la cantidad de agua necesaria. Las duchas suelen ser más eficientes en el consumo de agua, lo que se traduce en menores facturas y un mayor respeto por el medio ambiente. -
Instalación rápida y sencilla
Cambiar la bañera por un plato de ducha no requiere grandes reformas. En la mayoría de los casos, el proceso es rápido y relativamente sencillo, lo que significa que no tendrás que esperar mucho tiempo para disfrutar de tu baño renovado. Además, las opciones de platos de ducha a medida se adaptan perfectamente a tu espacio, eliminando la necesidad de costosas reformas.